Aymerich, Carlo / Escritor
La arquitectura de España y Portugal atraviesa hoy una fase de extraordinario florecimiento que se expresa con una extensa producción que atestigua una riqueza cultural y una capacidad técnico-constructiva latente durante los pasados ??regÃmenes autoritarios y resurgió exuberantemente después de los años setenta para renovarse. sus esplendores del Modernismo de hace cien años. Su vigencia es tal que hoy en dÃa es posible mirar las obras de los distintos Calatrava, Moneo, Siza, Souto de Moura, Tà vora, por citar solo algunas puntas de lanza, como paradigmas a los que hacer referencia para el diseño de este comienzo de siglo. . Para la maduración de este crecimiento, la aportación de diseñadores, técnicos y capital extranjero fue y es fundamental, denominada, con una apertura de miras muy rara en otros contextos, en conjunción con numerosas ocasiones, como exposiciones internacionales, grandes eventos deportivos, importantes recurrencias históricas. Esta contribución ha resultado sustancial en particular en lo que respecta a la introducción y difusión de tecnologÃas avanzadas, sistemas y elementos constructivos de nueva concepción, de herramientas de apoyo a la invención del diseño, la innovación ejecutiva y en todas aquellas ocasiones en las que se consideró una competencia y experiencia especÃficas ya adquiridas. útil si no es necesario. Gracias a estos niveles de competencia y pertenencia a los principales circuitos culturales, se han creado en la penÃnsula ibérica obras de gran impacto por parte de diseñadores extranjeros; obras que surgen en el escenario mundial y que, al interpretar un papel fundamental en la producción de España y Portugal,