De Giovanni, Maurizio / Escritor
Ángeles. Ángeles que ayudan, ángeles que protegen. Ángeles que asisten, ángeles que perdonan. Ángeles que vengan. Tenía manos mágicas, Nando Iaccarino, capaces de afinar cualquier motor. Afuera de su taller, limpio y ordenado más que una habitación de hospital, los fanáticos de los autos antiguos y las motos hacían fila, porque lo que otros hubieran tirado, él siempre lo reparaba. Sabía cuidar las cosas, Iaccarino. Ahora lo han matado, y depende de los Bastardos de Pizzofalcone descubrir quién lo hizo. Aunque cada uno esté pasando por un momento difícil, aunque cada uno tenga su angustia, sus dolores, sus secretos. Incluso si los cabecillas de la comisaría, que simplemente no pueden soportarlos, todavía esperan verlos caer. Como les pasa incluso a los ángeles.