Grimbert, Philippe / Escritor
François estaba impaciente por escuchar de Valérie las confidencias de su joven prima cuando, ahogada en una avalancha de alegres banalidades, le reveló que si este último lo habÃa encontrado impregnado de encanto y humor, en fin, atractivo en todos los sentidos, habÃa precisado. no poder pensar en entablar ninguna relación sentimental, y menos sexual, con un hombre de su edad. François habÃa recibido el final de la frase como un gancho en el hueco epigástrico. Nuestro héroe ha fijado el rumbo para unos sesenta rugientes. Ser percibido como un prejubilado de la vida cuando uno tiene un ático lleno molesta, empuja a una cierta forma de furia mezclada con tristeza. Asà que reacciona y establece, el primero en la historia de la humanidad, un golpe de estado cronológico: